El Barre es una disciplina de ejercicio que combina elementos de ballet, yoga, pilates y entrenamiento de fuerza, enfocándose en movimientos pequeños y controlados que ayudan a tonificar y fortalecer el cuerpo. Se realiza principalmente en una barra de ballet, de ahí su nombre, y se centra en mejorar la postura, la flexibilidad y la resistencia muscular. Lo que hace al Barre particularmente atractivo es su accesibilidad para personas de diferentes niveles de condición física, ya que los movimientos pueden ser modificados según las necesidades individuales. Además, al trabajar grupos musculares específicos con repeticiones altas y bajo impacto, el Barre es una opción excelente para quienes buscan mejorar su forma física sin someterse a entrenamientos intensos y agresivos. Este enfoque en la precisión y el control no solo contribuye a esculpir el cuerpo, sino que también promueve una conexión mente-cuerpo, lo que lo hace una opción completa y holística para el bienestar físico.

Pero...¿cómo nace el Barre?

Pues bien, esta disciplina fue creada por una bailarina llamada Lotte Berk

Hija de un rico comerciante judío, quedó huérfana de madre a los ocho años y desafió los deseos paternos volcándose en la danza moderna. Con su esposo y su hija Esther logró escapar de la Alemania nazi y establecerse en Londres, donde alternó trabajos como modelo con su carrera como bailarina. En 1959 abrió un estudio en un sótano de la calle Mánchester y fue desarrollando unas clases de ballet para no profesionales. 

El método Lotte Berk, que acabó de cuajar tras visitar a un osteópata por una pequeña lesión de espalda, atrajo a una selecta y fiel clientela que incluyó tanto a la escritora Edna O’Brien como a Joan Collins, e inclusonBarbra Streisand también lo probó.

Una de sus alumnas, Lydia Bach, llevó el método a Nueva York, donde se engancharon las actrices Candice Bergen y Ali McGraw, y de ahí saltó a Connecticut y a San Francisco.